CARTA DE EL FRENTE SINDICAL MEXICANO

Carta abierta

A los Diputados y Senadores de la LX Legislatura

Al Pueblo de México.

México vive momentos de grave peligro, derivados de la aplicación dogmática de las políticas económicas neoliberales, por tal razón y frente a la llamada “Reforma Energética” impulsada por el ejecutivo federal, El FRENTE SINDICAL MEXICANO (FSM), denunciamos que las iniciativas de reforma a leyes secundarias promovidas por Calderón (PAN) y Beltrones (PRI), tienen un claro y abierto carácter privatizador, y que de aprobarse, solo traerán efectos nocivos para el desarrollo de la Industria Petrolera y para la Nación Mexicana.

El periodo de los debates en el senado ha terminado, ahora a los legisladores de las diferentes bancadas les corresponde actuar con total responsabilidad y conciencia nacionalista, para dictaminar dichas iniciativas conforme al Texto Constitucional, y de plano, rechazar tales intentos de entrega de nuestros recursos energéticos a las transnacionales.

Los integrantes de las diversas organizaciones del FRENTE SINDICAL MEXICANO (FSM) nos oponemos firme y decididamente a cualquier modificación legal que permita la apertura de nuestra Industria Energética a las empresas extranjeras, y en especial al sector petrolero. Nosotros los trabajadores y ciudadanos mexicanos, estamos dispuestos a resistir con toda nuestra fuerza, para evitar que se sigan otorgando concesiones a las empresas nacionales y extranjeras en materia petrolera, en virtud de que contravienen los preceptos constitucionales establecidos en los artículos 27, 25 y 28.

Durante el reciente debate organizado y realizado por el Senado de la República, han quedado suficientemente claros los argumentos y razones de carácter técnico, económico, financiero y político, por lo que debería ser suficiente para que las bancadas legislativas desecharan las iniciativas privatizadoras.

La clase política de nuestro país, sigue empeñada en convertir al sector público en negocio privado, pasando por encima de lo mandatado por nuestra Carta Magna, introduciendo modificaciones en algunas leyes secundarias, para permitir la apertura de nuestra industria energética a las empresas privadas, y de paso, destrozando nuestras cadenas productivas, que tantos recursos le costó establecer a nuestra patria.

Las privatizaciones en nada han beneficiado al pueblo de México, así se han entregado Teléfonos de México, Ferrocarriles Nacionales, Puertos, Aeropuertos, Bancos, Carreteras, se ha concesionado ya, alrededor del 35 % de la generación eléctrica, y ahora pretenden quedarse con nuestro petróleo.

Los “argumentos” esgrimidos por los gobiernos en turno para impulsar la privatización de Petróleos Mexicanos, son la falta de tecnología y la escasez de recursos financieros. El FRENTE SINDICAL MEXICANO, rechaza tales supuestos, por faltos de veracidad y validez del grupo neoliberal en el poder. ¡AFIRMAMOS! Que PEMEX sí tiene la capacidad técnica y económica para la extracción del crudo y la realización de todos sus procesos, así como el conocimiento para su desarrollo científico y tecnológico.

Las iniciativas de Calderón y Beltrones, solo privilegian la extracción del petróleo para incrementar la exportación irracional y fortalecer la seguridad energética de los Estados Unidos, más que garantizar la seguridad y bienestar de nuestra nación. Lo que surgiría de ellas o de una combinación, no sería en modo alguno, la solución al desarrollo de la Industria Petrolera, sino al contrario, un gravísimo retroceso histórico que afectaría a toda la nación y a las próximas generaciones de mexicanos, a las que se les cancela el derecho al desarrollo económico y social.

No olvidamos que en 1938, la participación de los trabajadores y el pueblo de México fue fundamental para la expropiación petrolera, decretada por el General Lázaro Cárdenas; y con ella, se comienza en nuestro país a escribir la independencia económica de la Nación Mexicana, sabemos con toda claridad que hoy más que nunca la política de las nacionalizaciones tienen poderosos adversarios, entre ellos, una parte de los empresarios mexicanos ligados a los monopolios extranjeros junto a los elementos conservadores y reaccionarios del PAN y el PRI, enemigos de la democracia. Pero sabemos que a pesar de todas las presiones, los Diputados y Senadores nacionalistas, darán la batalla con su voto, en contra de las iniciativas privatizadoras y desnacionalizadoras.

Los trabajadores y ciudadanos hemos decidido declararnos en ESTADO DE ALERTA, para impulsar la Jornada Nacional de Lucha DEL PRIMERO DE SEPTIEMBRE, y organizarnos para impulsar la Huelga Nacional, en caso de la imposición de las reformas privatizadoras.

¡Por la unidad y combatividad de la clase trabajadora!

¡No permitiremos bajo ninguna modalidad la privatización del petróleo!

¡El petróleo es de todos los Mexicanos!

¡La Patria no se vende, la Patria se defiende!

¡Los Mexicanos unidos venceremos!